El teatro de la vida.

La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos.

¡Hey, hey, sonríe! Mas no te escondas detrás de esa sonrisa... Muestra aquello que eres, sin miedo. Existen personas que sueñan con tu sonrisa, así como yo. ¡Vive! ¡Intenta! La vida no pasa de una tentativa. ¡Ama! Ama por encima de todo, ama a todo y a todos. No cierres los ojos a la suciedad del mundo, no ignores el hambre. Olvida la bomba, pero antes haz algo para combatirla, aunque no te sientas capaz.

¡Busca! Busca lo que hay de bueno en todo y todos. No hagas de los defectos una distancia, y sí una aproximación. Acepta la vida, las personas, haz de ellas tu razón de vivir. ¡Entiende! Entiende a las personas que piensan diferente a ti, no las repruebes.

¡Eh! Mira. Mira a tu espalda, cuantos amigos... ¿Ya hiciste a alguien feliz hoy? ¿O hiciste sufrir a alguien con tu egoísmo? ¡Eh! No corras. ¿Para qué tanta prisa? Corre apenas dentro tuyo. ¡Sueña! Pero no perjudiques a nadie y no transformes tu sueño en fuga. ¡Cree! ¡Espera! Siempre habrá una salida, siempre brillará una estrella. ¡Llora! ¡Lucha! Haz aquello que te gusta, siente lo que hay dentro de ti. Oye, escucha lo que las otras personas tienen que decir, es importante. 

¡Sube! Haz de los obstáculos escalones para aquello que quieres alcanzar, mas no te olvides de aquellos que no consiguieron subir en la escalera de la vida. ¡Descubre! Descubre aquello que es bueno dentro tuyo. Procura por encima de todo ser gente, yo también voy a intentar. ¡Hey, tú! Ahora ve en paz. Yo preciso decirte que te adoro, simplemente porque existes.

El teatro de la vida. C.Chaplin. {Adaptado}

Tienes razones para sonreír.


Es duro ver como han cambiado las cosas. El darte cuenta de que lo que antes esta tu día a día, ahora es lo que echas de menos. Personas,   con   sus  más  y  sus menos,   pero  a  las  que 
querías, pasan a un segundo plano. Gente en la que confiabas te decepciona y, por así decirlo, traiciona. Todos avanzan sin miedo, y tú tienes pánico a todo lo nuevo. Ellos están seguros de las cosas, mientras que tú no eres capaz de decidir ni tu color favorito. Al parecer, tu forma de pensar no es la que tiene el resto del mundo, y hay veces que no entiendes nada. La verdad es que todo es muy complicado. 

Y, para colmo, a todas las cosas que te deprimen ahora se les suman todas aquellas que llevas arrastrando desde hace mucho tiempo. Heridas sin curar. Cuando piensas que has superado algo, otra cosa te deprime y todo lo que en realidad nunca superaste completamente, sólo conseguiste olvidarlo y apartarlo de tu mente, te derrumba. Pero, aunque todo sea complicado, nunca tengas nada claro y puedas pasarte horas llorando, sonríes. 

Sonríes para que nadie te pregunte '¿qué te pasa?' porque prefieres no hablar de ciertas cosas. Sonríes porque, de alguna manera, eres fuerte y tienes que demostrártelo a ti mismo. Sonríes porque sabes que, a pesar de todo, tienes razones para hacerlo.